A la hora de buscar la información de un inmueble que nos interese, ya sea para comprarlo o alquilarlo, es fundamental acudir al Catastro porque uno de sus datos más importantes es que nos dice los metros del inmueble, su fecha de construcción, si se trata de propiedad horizontal, etc. Por eso, vamos a dedicar este artículo a dar unas pinceladas del Catastro Inmobiliario.
¿Qué es el Catastro?
Se trata de un registro administrativo, que depende del Ministerio de Hacienda. Describe los bienes inmuebles rústicos, urbanos y de características especiales. La inscripción de los inmuebles en el Catastro es obligatoria y gratuita, a diferencia de lo que ocurre con el Registro de la Propiedad.
Regulación del Catastro:
Viene regulado por el Real Decreto Legislativo 1/2004, de 5 de Marzo, por el que se aprueba el Texto Refundido de la Ley del Catastro Inmobiliario.
Contenido de la descripción catastral:
El Catastro comprende las características físicas, económicas y jurídicas de los bienes inmuebles. Así, cabe mencionar: la localización y la referencia catastral, la superficie, el uso o destino, la clase de cultivo o aprovechamiento, la calidad de las construcciones, la representación gráfica, el valor de referencia de mercado, el valor catastral y el titular catastral, con su número de identificación fiscal o, en su caso, número de identidad de extranjero.
Usos de la información catastral:
- Originariamente la finalidad del Catastro ha sido tributaria, ya que proporciona la información necesaria para la gestión, recaudación y control de diversos impuestos por todas las Administraciones, ya sea la estatal, autonómica o local. Pero además tiene otro propósitos, entre los que cabe destacar los siguientes:
- Protección del mercado inmobiliario: refuerza la seguridad jurídica del tráfico inmobiliario al impedir la compra o la venta de fincas inexistentes o de características distintas a las reales. Por eso la ley prevé la coordinación del Catastro con el Registro de la Propiedad.
- Información necesaria para políticas públicas, como las relacionadas con ayudas públicas, el Sistema de Información Geográfica de Parcelas Agrícolas, la planificación y gestión de infraestructuras, o el medio ambiente (desarrollo de políticas forestales, gestión de parques y áreas naturales, ocupación del suelto, etc.).